Capítulo 33
Capítulo 33
Aldespertar Beatriz se sentia completamente sosegada y con ganas de revolcarse en la cama un rato más
intentó girarse con los ojos cerrados.
Sin embargo, no pudo hacerlo
Al abrir los ojos, lo primero que vio fue la mandibula definida de un hombre, desde el mentón hasta el cuello, marcada y sensual, aún más impresionante que los modelos de las revistas que solis revisar.
Le habian dicho una vez, durante una filmación, que los actores necesitaban tener una buena estructura ósea, más que una apariencia atractiva, para transmitir una historia frente a la cámara.
Javier no solo tenia un hermoso rostro, sino que su estructum ósea era impecable, con una nanz prominente y unos ojos profundos, lo que le otorgaba una apariencia misteriosa
Beatriz pensó que si el intentara actuar en su mundo, incluso sin habilidades de actuación, con solo su apariencia se haria famoso
Pero en ese momento, lo que realmente importaba era..
¿Por qué
ué estaban abrazados en la cama desde tan temprano?
Ella se mostraba un poco nerviosa.
Aunque se tenía que admitir que Javier era muy guapo,
Pero ella también era bella, no había sido tomada ventaja de ella en esta situación?
La fuerte mano del hombre rodeaba la cintura de Beatriz.
Ella intentó remover su brazo sigilosamente para poder desicarse fuera de la cama.
Pero justo cuando tocó el brazo de Javier, el abrió los ojos
Beatriz tartamuded: “Eh…”
Javier la soltó de manera bastante fria. “Explicate”
Beatriz respondió: “No intenté seducirte nacercarme a ti. Mira bien, fuiste tú quien me abrazó.”
Javier alzó una ceja. Text property © Nôvel(D)ra/ma.Org.
Mientras más hablaba Beatriz, más insegura se sentia, consciente de que solia moverse mucho al dormir, lo que podría haberla llevado al lado del hombre.
Aunque la cama era grande, no era improbable que se hubieran terminado abrazando después de que ella se moviera hacia él durante la noche.
Sin embargo, ella noté que no había sido ella quien se habla movido hacia Javier, sino que él la habla empujado hacia un lado de la cama. dejando un amplio espacio libre a su lado.
Evidentemente, Javier también se dio cuenta de esto
Beatriz, sintiéndose moralmente superior, le exigió: “Explicate
Javier, imperturbable, respondid: “Esta es mi cama, Sita: Marchena, y darte un espacio para dormir ya es un acto generoso de mi parte.”
Ella quedó sin palabras.
Era tipico de un magnate, capaz de manipular la situación a su favor
Después de todo, los empresarios tenían el corazón oscuro.
Beatriz se levantó y fue al baño.
Javier, observando su silueta, parecía un poco pensativo.
Cogió una botella de agua de la mesita de noche, abrió un cajón, sacó un frasco de medicina y tomó dos pastillas, luego llamó a uno de los
sirvientes
Poco después, Beatriz escuché un golpe en la puerta y fue a abrir.
Lucrecia, con los ojos hinchados de llorar, estaba parada afuera, mirando a Beatriz con certo manosprecio mientras sostenia un conjunto de гора
Había visto a los sirvientes llevarle ropa nueva que las marcas de lujo enviaban a lo familia Mangane cada temporada, ropa que ni siquiera habla sido desempacada. Siguiendo las órdenes del joven señor, hablan elegido un vestido de la tala más pequeña para la señora y lo hablan Bevado
amina
Al ver lo que estaba sucediendo, Lucrecia cogió la ropa de manos de los sirvientes y decidió ella mlama comprobar a situación.
Capitulo 34